
Las posesiones diabólicas son un tema muy viejo, la Biblia narra muchas experiencias de exorcismo. Un demonio entra en el cuerpo de un humano y se adueña de sus acciones y pensamientos.
Cuando mayor auge estuvieron las posesiones demoniacas, fue en los siglos XVI y XVII, cuando la Iglesia Católica decreto que el demonio estaba haciendo de las suyas con la humanidad y se dedicaron a combatirlo realizando miles de exorcismos.
En esa época fueron condenados muchas brujas e histéricos, sin dejar de lado aquellas personas que amenazaban a la iglesia. Las brujas eran las que no tenían escapatoria, pues sus ´practicas herejes las llevaban a una condena de muerte inmediata, no sin antes darles una tortura implacable. Por desgracia muchos inocentes perecieron en ese tiempo.
Fue Francis Hutchinson un sacerdote escéptico a las posesiones el que comenzó la motivación para dar tratamiento médico a la histeria, siendo la medicina un mejor remedio que la horca o la hoguera. Le costó mucho trabajo, pero gradualmente se fue eliminando la idea de las posesiones y la brujería, y así investigar medicamente a los pacientes.
Sin embargo así como existe el bien, existe el mal, no se descarta que la prácticas de brujería continúen en la época actual, y del mismo modo la iglesia sigue practicando los exorcismos de manera discreta. El Vaticano es un renuente en hablar del tema, pero existe dentro de su pirámide escalonaría, un selecto y especializado grupo de religiosos dedicados de lleno a combatir al demonio en este planeta.
Cuando mayor auge estuvieron las posesiones demoniacas, fue en los siglos XVI y XVII, cuando la Iglesia Católica decreto que el demonio estaba haciendo de las suyas con la humanidad y se dedicaron a combatirlo realizando miles de exorcismos.
En esa época fueron condenados muchas brujas e histéricos, sin dejar de lado aquellas personas que amenazaban a la iglesia. Las brujas eran las que no tenían escapatoria, pues sus ´practicas herejes las llevaban a una condena de muerte inmediata, no sin antes darles una tortura implacable. Por desgracia muchos inocentes perecieron en ese tiempo.
Fue Francis Hutchinson un sacerdote escéptico a las posesiones el que comenzó la motivación para dar tratamiento médico a la histeria, siendo la medicina un mejor remedio que la horca o la hoguera. Le costó mucho trabajo, pero gradualmente se fue eliminando la idea de las posesiones y la brujería, y así investigar medicamente a los pacientes.
Sin embargo así como existe el bien, existe el mal, no se descarta que la prácticas de brujería continúen en la época actual, y del mismo modo la iglesia sigue practicando los exorcismos de manera discreta. El Vaticano es un renuente en hablar del tema, pero existe dentro de su pirámide escalonaría, un selecto y especializado grupo de religiosos dedicados de lleno a combatir al demonio en este planeta.
yo creo que no debieron matar a esas pesonas por que no tenian sertesa pero aun asi yo creo en las posesiones por que el diablo es astuto y se transforma
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